Merck interrumpió el desarrollo sobre dos vacunas contra el covid-19 a finales de enero, pero continúa investigando dos tratamientos contra la sepa, incluido el molnupiravir, desarrollado con la empresa estadounidense Ridgeback Bio.

Los resultados de este estudio «son prometedores», aseguró William Fischer, uno de los directores de ña investigación y profesor de medicina en la Universidad de Carolina del Norte.

Si se refuerzan con estudios adicionales, podrían tener importantes consecuencias en términos de salud pública, ya que el virus continúa propagándose y evolucionando en el mundo».

Merck también está trabajando en un tratamiento llamado MK-711.

Los primeros resultados de los ensayos clínicos muestran una reducción de más del 50% en el riesgo de muerte o insuficiencia respiratoria en pacientes hospitalizados con formas moderadas a graves de covid-19, dijo el grupo a fines de enero.